martes, 10 de abril de 2012

Critica: “We Need To Talk About Kevin”

Lo caótico que representa la popularmente conocida “Fiesta de la Tomatina”, en el municipio valenciano de Buñol, grafica desde el comienzo del film el desorden retrospectivo al cual nos sumerge esta obra independiente de Lynne Ramsay. 

Eva (Tilda Swinton) y Franklin (John C Reilly) son una pareja con ambiciones propias, vinculadas al arte (él fotógrafo, y ella…bueno, ella trabaja en una agencia de viajes, pero le gusta pintar y viajar, ok! También cuenta, viejo!).Llegados a los 40 deciden embarcarse en el mundo de la “familia tipo”.
Dicho emprendimiento traerá las consecuencias de un niño incordio(Jasper Newell de “mocoso”, Ezra “Sofía Gala” Miller de grande),el cual manipula tanto física como psicológicamente hablando a su madre, creando una distancia tanto como el Franklin de Reilly como a esa hermanita a la cual veremos padecer a medida que la historia termine de jugar a los flashbacks en aproximadamente 40 o 50 minutos de su comienzo.


Manchas rojas por doquier, condena social, y sonidos de regaderas son las curiosas piezas que se nos ofrecen para ensamblar en la segunda mitad de la película, en la cual nos dimos cuenta que valió la pena la paciencia que le tuvimos al principio.


Puntualmente podemos apreciar que esta película tiene como motor una relación, qué es la de madre e hijo. Se destaca la tristeza de Tilda Swinton(Narnia, Benjamin Button) como madre con sueños inconclusos a raíz de un hijo que la esta enloqueciendo y resquebrajando aún más un matrimonio compuesto por un padre prácticamente ausente, ciego y egoísta, encarnado por un John C Reilly que nos ofrece una vez más el sinónimo de “versatilidad actoral”(Boogie Nights, Thin Red Line, Step Brothers)en la pantalla grande.


Sorprende la interpretación sombría del andrógino de Ezra, llevando su papel a un extremo sumamente macabro, que incluye(el que ve un Spoiler acá tiene cola de paja, canté!)Un guiño a aquellos púberes que alguna vez deciden llamar la atención en la escuela(Teléfono Gus Van Sant!).


En síntesis: Fuimos a buscar un drama, y nos encontramos con un thriller. Después de todo no nos fue tan mal. Podríamos haber terminado peor: Haber concebido un niño así durante los 107 minutos de película.



x Cristian Baral.- CINEMA-SCOPE

1 comentario:

Angie dijo...

Interesante la crítica. Le tenía ganas a esta peli y ahora con lo que contás, definitivamente voy a darme una vuelta por el cine. La estrenarán en el Victor..jaj!